¿Para que sirve el agua termal?
- Formuly Piel
- 27 mar
- 2 Min. de lectura
El agua termal se ha convertido en un aliado imprescindible en el cuidado de la piel gracias a sus propiedades calmantes, hidratantes y antioxidantes. Extraída de manantiales subterráneos, esta agua rica en minerales y oligoelementos ofrece múltiples beneficios para todo tipo de pieles, especialmente las sensibles y deshidratadas. ¿Para que sirve el agua termal y que es?
El agua termal proviene de fuentes naturales subterráneas y se caracteriza por su alto contenido en minerales como calcio, magnesio y silicio, esenciales para mantener la piel saludable. A diferencia del agua común, no contiene químicos ni impurezas y tiene propiedades dermatológicas que ayudan a mejorar el equilibrio cutáneo.
1. Hidratación Intensa
El agua termal ayuda a mantener la piel hidratada durante todo el día, evitando la sensación de sequedad y tirantez. Es ideal para pieles deshidratadas y expuestas a factores externos como el clima o la contaminación.
2. Calma la Irritación y el enrojecimiento
Gracias a su acción antiinflamatoria, alivia la piel irritada por el sol, el viento o el frío. También es eficaz para calmar el enrojecimiento en pieles sensibles o con afecciones como rosácea y dermatitis.
3. Propiedades antioxidantes
Sus minerales actúan como antioxidantes naturales, protegiendo la piel del daño causado por los radicales libres y previniendo el envejecimiento prematuro.
4. Refresca y revitaliza
Ideal para usar en climas cálidos o después de hacer ejercicio, el agua termal proporciona una sensación de frescura inmediata y revitaliza la piel al instante.
5. Fija el maquillaje
Unas pulverizaciones después del maquillaje ayudan a fijarlo y darle un acabado más natural y duradero.
6. Alivio post-tratamientos dermatológicos
Es perfecta para calmar la piel después de la depilación, peeling químico o tratamientos con ácidos, evitando la irritación y acelerando la regeneración cutánea.
Incorporar el agua termal en tu rutina diaria es muy sencillo:
Mañana y noche: Rocía el agua termal sobre la piel limpia antes de aplicar tu crema hidratante.
Durante el día: Aplícala para refrescar y rehidratar el rostro, especialmente en climas secos o después de la exposición al sol.
Después del maquillaje: Pulveriza una fina capa para fijarlo y darle un acabado más natural.
Después de la depilación o tratamientos dermatológicos: Ayuda a calmar la piel y reducir la inflamación.
El agua termal es apta para todo tipo de pieles, pero es especialmente beneficiosa para:
Pieles sensibles y reactivas: Reduce la irritación y el enrojecimiento.
Pieles secas y deshidratadas: Aporta un extra de hidratación.
Pieles grasas y con acné: Ayuda a calmar la inflamación sin aportar grasa.
Pieles maduras: Sus minerales combaten los signos de envejecimiento y mejoran la elasticidad.
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